Eva Rodríguez, Editora: El 38 % de los científicos encuestados por ‘Science’ han sido acosados por informar sobre Covid-19. SINC N° 505 -Número 505 25/03/2022 08:00 CEST
Uno de cada tres científicos que han participado en una encuesta llevada a cabo por el equipo de redacción de la revista Science han sufrido intimidación por hablar sobre la pandemia. La mayoría de ellos recibieron dicha intimidación a través de Twitter o por correo electrónico.
En los dos años que ha durado la pandemia, la comunidad científica ha aumentado su visibilidad en los medios de comunicación y de cara a la opinión pública, por la demanda de información sobre la crisis por la covid-19. Esto ha provocado en paralelo que, desde el inicio, algunos de ellos hayan sido objeto de ataques de negacionistas, y de aquellas personas que creen que el virus fue creado intencionadamente para causar daño o que las vacunas son peligrosas.
En octubre de 2021, Nature publicaba un informe en el cual se señalaba que el 81 % de los 321 científicos con los que contactaron y que habían hablado con medios de comunicación, declaraban haber recibido al menos ataques personales ocasionales por informar de la pandemia.
Ahora, el equipo de redacción de Science saca a la luz otro trabajo en el que da a conocer la experiencia de investigadores que, sin ser mediáticos, han publicado estudios sobre la covid-19.
"La diferencia más importante con el estudio previo de Nature es el tipo de muestra. En ese trabajo se encuestó a los investigadores que figuraban en las listas de medios de comunicación tratando el tema de la covid-19 en varios países, así como otros que habían sido destacados en la cobertura mediática”, dice a SINC Cathleen O'Grady, colaboradora de Science, que fue la encargada de diseñar, analizar los datos y escribir el tema.
En cambio, añade, “nosotros queríamos saber cómo eran estos problemas en el caso de los científicos que tenían menos o ninguna cobertura mediática, y en el de aquellos que eran activos en las redes sociales, sin ser destacados en los medios de comunicación tradicionales”.
El metacientífico Tim Errington asesoró sobre el proceso, los métodos de la encuesta y el análisis estadístico. Por su parte, Martin Enserink, editor de noticias internacionales en la revista, aportó su contribución editorial.
Resultados anónimos
Para iniciar la investigación lanzaron una encuesta en línea a 9.585 investigadores que representaban a una amplia gama de disciplinas, a la que respondieron un total de 510. El resultado fue que el 38 % informó de al menos un tipo de ataque.
“Obtuvimos una muestra mayor que la de la encuesta de Nature, e incluimos a científicos con y sin mucha atención pública. Dado que preguntamos a un grupo muy diferente de personas sobre sus experiencias, nuestros resultados son distintos”, explica O'Grady.
El trabajo también requirió una revisión ética, a través de la Biomedical Research Alliance de Nueva York (BRANY, por sus siglas en inglés).
“La encuesta recogía datos que podían utilizarse para identificar a las personas. Por ejemplo, podría mirar todas las respuestas que alguien dio en la encuesta y averiguar quién es esa persona, aunque no haya dado su nombre o su correo electrónico. Dado que la recopilación y posterior publicación podría haber puesto en peligro a los participantes, y que la encuesta pedía a la gente que describiera experiencias difíciles e incluso traumáticas, queríamos estar seguros de que estábamos haciendo las cosas con cuidado y de forma ética”, agrega.....