miércoles, 15 de septiembre de 2021

806- Hepatitis alcoholica

Vetriselvan Subramaniyan, Srikumar Chakravarthi, Ravindran Jegasothy, Wu Yuan Seng, Neeraj Kumar Fuloria, Shivkanya Fuloria, Iswar Hazarika, Anju Dasg. Enfermedad hepática asociada al alcohol: una revisión sobre su fisiopatología, diagnóstico y farmacoterapia. Elsevier Toxicol Rep. 2021; 8: 376–385. Department of Pharmacology, Faculty of Medicine, Bioscience and Nursing, MAHSA University, Malaysia.

Resumen

Una de las cargas mundiales en la atención de la salud es la enfermedad hepática asociada al alcohol (alcohol-associated liver disease-ALD) y su  mortalidad, causada por el consumo agudo o crónico de alcohol. El consumo crónico de alcohol daña el mecanismo de defensa normal del hígado y es probable que altere el sistema de barrera intestinal y las células inmunitarias de la mucosa, lo que conduce a una disminución de la absorción de nutrientes. El tratamiento de la ALD depende del espectro de la lesión hepática que causa: hígado graso, hepatitis y cirrosis. La base de la terapia comienza con la abstinencia del alcohol. Los corticosteroides se utilizan para el tratamiento de la ALD, pero debido a su mala aceptación, la mortalidad continua y la identificación del factor alfa de necrosis tumoral como un componente integral en la patogénesis, han centrado sus esudiosa en la pentoxifilinay, que es el anticuerpo contra dicho factor para neutralizar las citocinas en el tratamiento de la hepatitis alcohólica grave. Los antioxidantes también juegan un papel importante en el tratamiento, pero hasta el día de hoy no existe una terapia universalmente aceptada disponible para ninguna etapa de la ALD. Los aspectos del tratamiento deben restaurar las funciones intestinales y requieren tratamientos basados ​​en nutrientes para regular dicha funciones y prevenir lesiones hepáticas. La acción vital de los ácidos grasos saturados controla en gran medida la barrera intestinal. En general, esta revisión se centra principalmente en el mecanismo de la disfunción metabólica inducida por el alcohol, la contribución a la patogénesis del hígado, su diagnostico, el efecto en el embarazo y la terapia dirigida a la ALD.

- Biomarcadores: ver Tabla 2

1. Introducción

El consumo crónico y excesivo de alcohol es un problema de salud global, que conduce a enfermedades clínicas y cambios patológicos que causan enfermedad hepática asociada al alcohol (ALD). Esta patologia esta asociada con la  inflamación y lesión hepática o fibrosis progresiva que produce tres clases principales, cada una de las cuales rara vez existe en forma pura. Estos incluyen: hígado graso, hepatitis alcohólica y cirrosis. El hígado graso es una característica que está presente en la mayoría de los borrachos crónicos y se asocia con la ingesta crónica de alcohol. Un porcentaje significativamente menor de consumidores de alcohol que beben en exceso progresará a la hepatitis alcohólica, que se ha demostrado que es un precursor de la cirrosis hepática. 

La enfermedad hepática grave asociada al alcohol tiene un pronóstico muy precario. La mortalidad de los pacientes con hepatitis asociada al alcohol que tienen cirrosis relacionada es superior al 65% a los 5 años. Aunque se considera que el alcohol es una hepatotoxina directa, sólo alrededor del 20% de todos los pacientes con trastorno por consumo de alcohol desarrollan posteriormente una hepatitis asociada al alcohol. 

A nivel mundial, alrededor de 150 millones de personas están infectadas con el virus de la hepatitis C (VHC) y cada año aumenta la prevalencia de la tasa de mortalidad.  La razón de esto se debe a otros factores comórbidos que incluyen el estado inmunológico, la herencia, la edad, los factores nutricionales y el género. Tanto la duración como la cantidad de ingesta de alcohol son factores de riesgo más importantes que intervienen en el desarrollo de la ALD. El patrón del tipo de bebida y el patrón de beber juegan un papel menor en la determinación del riesgo. Parece que se requieren factores de riesgo adicionales que aún no están bien definidos en el progreso de la lesión hepática más allá de la etapa de hígado graso. 

Los corticosteroides se utilizan para el tratamiento de la ALD y, recientemente, debido a los hallazgos de la vinculación del factor alfa de necrosis tumoral con la ALD, se presta más atención a sus anticuerpos. El estudio anterior sugiere que la exposición al acetaldehído de la bebida alcohólica, tiende a ofrecer los efectos tóxicos de hipotensión, taquicardia, enrojecimiento facial y vómitos. 

Además, el mayor porcentaje de consumo de alcohol exhibió efectos de neurotoxicidad y daño hepático.También se ha observado que los antioxidantes producen un efecto beneficioso en la ALD. Sin embargo, no existe una estrategia de tratamiento adecuada que pueda tratar a ningún paciente con ALD. Esto crea una brecha en la investigación. 

La presente revisión aborda la brecha en la investigación y resume las diferentes terapias farmacológicas de la ALD dando un resumen de la patogénesis y el diagnóstico

Leer el artículo completo

(*) Una vez que esta en la pagina del articulo, pulsando el botón derecho puede acceder a su  traducción al idioma español. Este blog de bioquímica-clínica está destinado a profesionales bioquímicos y médicos; la información que contiene es de actualización y queda a criterio y responsabilidad de los mencionados profesionales, el uso que le den a la misma. Las páginas de este blog , se renuevan dentro de 5 días en forma automática. Cordiales saludos. 
Dr. Anibal E. Bagnarelli,
Bioquímico-Farmacéutico-UBA.
Ciudad de Buenos Aires, R. Argentina